Post by Gintori Hayashi on Nov 12, 2021 5:25:28 GMT
Habían pasado los días como si hubiese sido una eternidad para Gintori, pues la emoción de conocer a Cali la tenía bastante animada... parecía que quizá las cosas podrían cambiar para mejor. Fue tachando día a día en su calendario, pensando en que tanto podría hacer, hablar con ella, era la primera vez que asistiría a una casa y sobre todo el que la haya invitado a quedarse, en Japón podría incluso verse un tanto mal pero quería vivir esa experiencia.
Aquella mañana se despertó tarde... bastante, ya eran casi las 4 PM, haciéndola correr con todas sus cosas, armando una pequeña maleta con su pijama, una manta, cambio de ropa y algunos dulces. Había enviado un mensaje a sus compañeros de trabajo para pasar a recoger el pastel que había prometido llevar.
Antes de salir del departamento dejó comida, agua suficiente y arena limpia para Happy, era un gato flojo, estaba segura que estaría bien hasta el otro día por su cuenta... aunque, no había mencionado nada a Gonryu, no quería estar condicionada de tener que regresar a alguna hora en específico... además, "¿Qué más da si luego está ocupado tanto tiempo?, no notará mi ausencia". Pensó para si misma y salir del departamento.
Aquella mañana se despertó tarde... bastante, ya eran casi las 4 PM, haciéndola correr con todas sus cosas, armando una pequeña maleta con su pijama, una manta, cambio de ropa y algunos dulces. Había enviado un mensaje a sus compañeros de trabajo para pasar a recoger el pastel que había prometido llevar.
Antes de salir del departamento dejó comida, agua suficiente y arena limpia para Happy, era un gato flojo, estaba segura que estaría bien hasta el otro día por su cuenta... aunque, no había mencionado nada a Gonryu, no quería estar condicionada de tener que regresar a alguna hora en específico... además, "¿Qué más da si luego está ocupado tanto tiempo?, no notará mi ausencia". Pensó para si misma y salir del departamento.
La tarde estaba cayendo y con ella el viento otoñal se hacía presente. La peliplata se apresuró a pasar al café, llevando un poco más de lo que había dicho, buscando la dirección que la rubia le había dado. Sus manos estaban frías y temblaba un poco por los nervios; cuando por fin encontró el edificio, levantó la mirada solo para volver a esconderla en su celular mientras tragaba con algo de dificultad, enviándole un mensaje a Cali.
— "Hola Cali. Creo que ya estoy fuera del edificio" —