Post by Kenji Kenzo on Feb 12, 2022 7:58:24 GMT
Después de aquella noche en especial, el kitsune se había sentido ansioso con los nuevos sentimientos que tenía albergados en su corazón, era una extraña mezcla entre felicidad, miedo por el futuro.. Y culpa, el rostro de quien fue su primer amor comenzaba a ser borroso pero de igual manera le recordaba con un cariño de antaño, ahora en lo primero que pensaba en la mañana era en su amigo, aquel quien le había mostrado lados de si mismo que nunca antes había explorado, cada vez que le veía su corazón amenazaba con salir volando y sus mejillas comenzaban a arder, estaba cansado de eso
-Si tanto te gusta deberías salir con él.. Digo hablas todo el tiempo de ese sujeto, Joa esto, Joa aquello, solo dile que te gusta no le veo lo malo jaja
Esas habían sido las palabras de quien por causas del destino hoy llamaba hijo, aquel con quien hacía tiempo había peleado por algo similar, se seguía repitiendo de ello, pero agradecía su ayuda de todas formas
Después de una platica en un chat donde por fin tuvo la valentía de pedirle una cita a quien ahora era su enamorado, Kenzo no podía hacer más que ahogarse en los nervios y la vergüenza, aunque lo negara tenía una sonrisa en el rostro, los días pasaron y él junto a su hijo crearon el plan perfecto, se puso su mejor ropa, un suéter con cuello de tortuga azul marino, un pantalón de vestir y zapatos negros, lo acompaño con un saco del cual se tomó la libertad de no abrochar los botones, su cabello ahora peinado con una coleta lucia deslumbrante, se miró al espejo tratando de obtener un poco más de valentía, tomó aquel ramo de flores que estaban decoradas como pequeños payasos el cual había comprado con anticipación y salió directo al restaurante donde había acordado verse con Joa
Llegó, lo vio en una mesa afuera del local y entonces sus mejillas le jugaron en contra, se tornaron de aquel ligero color carmesí que hacía juego con su cabello, se acercó al contrario, carraspeo un poco para llamar su atención
-Joa.. Feliz.. Feliz San Valentín, toma antes de que cambie de opinión...
Le tendió el arreglo de flores tratando de desviar su mirada esperando que su corazón no explotara y que el contrario aceptará el obsequio
-Si tanto te gusta deberías salir con él.. Digo hablas todo el tiempo de ese sujeto, Joa esto, Joa aquello, solo dile que te gusta no le veo lo malo jaja
Esas habían sido las palabras de quien por causas del destino hoy llamaba hijo, aquel con quien hacía tiempo había peleado por algo similar, se seguía repitiendo de ello, pero agradecía su ayuda de todas formas
Después de una platica en un chat donde por fin tuvo la valentía de pedirle una cita a quien ahora era su enamorado, Kenzo no podía hacer más que ahogarse en los nervios y la vergüenza, aunque lo negara tenía una sonrisa en el rostro, los días pasaron y él junto a su hijo crearon el plan perfecto, se puso su mejor ropa, un suéter con cuello de tortuga azul marino, un pantalón de vestir y zapatos negros, lo acompaño con un saco del cual se tomó la libertad de no abrochar los botones, su cabello ahora peinado con una coleta lucia deslumbrante, se miró al espejo tratando de obtener un poco más de valentía, tomó aquel ramo de flores que estaban decoradas como pequeños payasos el cual había comprado con anticipación y salió directo al restaurante donde había acordado verse con Joa
Llegó, lo vio en una mesa afuera del local y entonces sus mejillas le jugaron en contra, se tornaron de aquel ligero color carmesí que hacía juego con su cabello, se acercó al contrario, carraspeo un poco para llamar su atención
-Joa.. Feliz.. Feliz San Valentín, toma antes de que cambie de opinión...
Le tendió el arreglo de flores tratando de desviar su mirada esperando que su corazón no explotara y que el contrario aceptará el obsequio