Sur Cardinal

Edad: 72 años (aparenta 29 años).

Raza: Unicornio

Oficio humano/oculto: Botarga - Ex co-dueño y empleado del club Le Vent 

Distrito de residencia: Acuífero.

Fuerza: ★★★★

Social: ★★

Agilidad: ★★★★

Resistencia/Salud: ★

Inteligencia: ★★★★

Photokinesis: posibilidad de manipular la luz para iluminar estancias o cegar al enemigo. Medición: Agilidad.

Multiplicación: son capaces de multiplicar más de un objeto o a sí mismos con un máximo de dos multiplicaciones. Estas multiplicaciones son de luz, pero pueden sentirse muy reales por una poca duración de tiempo (duración un thread). Medición: Inteligencia. 

Telepatía animal: permite comunicarse con otros animales de distinta especie. Medición: Social.

Sur se considera una persona cautelosa y práctica, que contrasta perfectamente con su lado curioso y “comunicativo”. Su idea de mantenerse al margen de cualquier problema, se ve ofuscado por su habilidad en meterse donde no le llaman.

Suele ser muy activo, por lo que su entorno se puede considerar un caos; cosa que se le ocurre, cosa que trata de hacer al instante, lo que hace que pocas veces complete algo y que tenga un sin fin de proyectos en las manos.

Suele ver los defectos en los demás, pero es incapaz de ver sus propios errores y si bien es capaz de mencionarlos, termina siempre por ponerse nervioso, comenzando a tartamudear disculpas.

De su infancia poco le gusta decir, pues no creció en el dulce ambiente familiar que cualquier niño merece tener; hubo madre y padre, pero no cariñosos y preocupados, ni siquiera sabe en la actualidad que fue de ellos.

Siendo uno de cuatrillizos, la individualidad fue escasa; saber quién era realmente él y que lo hacía diferente de sus hermanos.

En un inicio, no buscó separarse de ellos; la fuerza yacía en su unión. Con el pasar de los años y al llegar a la adolescencia, eventualmente cada uno tomó un rol, forjando a partir de ello una verdadera personalidad. La ambición no faltó en ninguno de ellos, anhelando una mejor vida, una donde el hambre y el frio no los volverían a tocar, donde cada capricho que desearan fuera cumplido y todos los sueños de infancia se vieran realizados.

Tomaron cualquier trabajo que se les presentó, algunos cuestionables, otros completamente honrados; ellos no cuestionaban lo que la vida les ponía enfrente. Eventualmente su condición económica comenzó a mejorar, escalando entre los diferentes estratos sociales. La vida parecía sonreírles y al mismo tiempo la avaricia y los celos acecharon su relación. Una fuerte pelea, por dinero, fue lo que hizo que se separaran, cada uno tomando su propio camino.

Él no desperdició el tiempo, pues ahora libre de la mano de sus hermanos, la educación fue su primera opción, destacando entre sus nuevos compañeros. Su orgullo y seguridad crecieron, más aun cuando al cursar la universidad, se le ofreció un programa para estudiar en América; a sus memorias, recuerdos de su infancia observando el cielo estrellado de Paris y estirando sus manos para alcanzar la luna. Esa era la oportunidad para hacerlo realidad.

Un mes antes de emprender su viaje, el mayor de los cuatrillizos fue a verle. Habían pasado años desde la ultima vez estando frente a frente, y aun así parecía que no había pasado ni un día; quizás porque sus rostros seguían siendo los mismos. Su hermano le suplico quedarse, ¿cómo iba a alejarse tanto de ellos? No fue una suplica, pero si fue dicho con el mismo tono condescendiente que usaba cuando niños. Y una nueva propuesta, un club donde el flujo de dinero sería constante, aunque no de manera completamente legal; pero más importante que ello, el volver estar juntos como antes, los cuatro, ¡y no solo eso! el cambiar sus nombres a algo emblemático, que les serviría como firma. Siempre frágil y débil, no podía defraudarlos, no cuando ellos alguna vez le habían dado todo. Con un asentimiento, todo lo que había forjado se vino abajo y con ello Sur Cardinal nació.

Pero ahora, con dos de sus hermanos en manos de la Flor de Lys y el otro lejos de París, tal vez los Cuatrillizos Cardinales estaban destinados a morir.