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Post by Asher D'Argent on Oct 17, 2021 23:50:41 GMT
Inicio del dia, una calida y reconfortante luz dio a parar colandose por las blancas cortinas de su habitacion mientras lentamente y entre bostezos se dispuso a despertar, estuvo casi de vela la noche anteior aun mirando documentos sobre su mesa de noche al alzar ligeramente la vista a su reloj de su mesa de noche para comprobar el horario del dia mientras se sentaba y estiraba el hombre en su gran haitacion adecuada para su tamaño, saliendo de las suaves y calidas sabanas de su letargo.
vistiendo algo mas comodo se dirigio al comedor de su hogar mientras revisaba su celular con lentitud al tener aun el sueño encima tratando de quitarlo con sus alimentos sin mucho exito.
Hasta que un mensaje de confirmacion aparecio abriendolo y haciendole casi despertar sonriendo con emocion como si de un niño pequeño se tratase
—oooh, por fin viene en camino...— decia para dejar el aparato y poder terminar sus alimentos para ir entonces de camino dentro de la casa para recibir al repartidor, despues de todo debia asegurar llegara bien su pedido
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Post by Lugh O'Floinn on Oct 18, 2021 4:35:04 GMT
Era aún de noche cuando se levantó de su lecho. Sentado en el borde de la cama, simplemente esperó a que su cabeza abriese los ojos. Sus ojos centellearon bajo el fantasmagórico lumbre azul de la flama que manaba de su cuello decapitado.
«Qué cosa tan curiosa es el reloj interno de cada uno» pensó.
Finalmente se levantó, se vistió, llevando consigo su cabeza cogió las llaves de la motocicleta -que se aseguraba todas las noches de dejar sobre la mesita de noche- y salió de la residencia. Estar muerto tenía sus ventajas. Definitivamente, la mejor de ellas era la innecesariedad de una alimentación. Tras acicalar las crines de Epona, en el patio, montó la moto, metió y giró la llave y partió hacia la oficina.
Luego de conducir por cerca de cinco minutos, aparcó frente a un edificio de relucientes ventanas de cristal y, tras detener el motor, quitó la llave y se dirigió hacia la entrada de la agencia de correos. Usando su -inmensamente útil- habilidad de inmaterialidad, atravesó la cortina metálica y abrió desde adentro.
—Bien— se dijo, yendo a verificar las gavetas —, hay un paquete para... Eh... Asher D'Argent. Esto debió llegar ayer a última hora.
Encendió la computadora y revisó su Tinder mientras cargaba el sistema operativo. No tenía matches. Se rascó la barbilla con la yema de los dedos y apenas se abrió la interfaz de la página del correo, verificó el código de barras y redactó un mensaje destinado al susodicho.
«Estimado señor D'Argent. Junto con desearle un buen día, Encomiendas Sleepy Hollow le informa que su encargo ha sido recepcionado con éxito en nuestra oficina y será entregado en cuestión de, máximo, una hora. ¡Gracias por preferirnos!
shollowenc@noreply»
Llevó cuidadosamente el bulto hasta la moto y lo cargó con delicadeza en el compartimiento destinado a la carga frágil. Activó la alarma de la oficina y volvió a encender el motor para, instantes después, partir rumbo a la dirección. Afortunadamente, estaba en el distrito dorado, lo cual significaba que sería una entrega en una locación cercana. Pasar del distrito fauna al dorado implicaba un cambio drástico en cuanto a iluminación, pero no era algo que le afectara sobremanera. Era fácil moverse en esas calles bien señalizadas, perderse era prácticamente imposible y lo era aún menos para quien estuviese acostumbrado a pasear por allí. Tal era su caso, quizá desde hacía más tiempo del que pudiera recordar. Viró en una intersección y llegó a la dirección del paquete. Sin detener el motor, estacionó y luego sacó la encomienda de la cajuela. Se acercó con esta en las manos y finalmente llamó a la puerta.
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Post by Asher D'Argent on Oct 18, 2021 5:27:41 GMT
Aprovecho el corto tiempo de espera por su paquete, mas que nada porque sabia la sucursal era en su misma area aunque el paquete viniese de otra parte en el distrito Fauna por lo que esperaba al menos el trasporte a su hogar fuera bien, pero imagino no deberia de preocuparse por ello.
Con eso en mente se dispuso a terminar de arreglarse un poco peinando sus largos cabellos o deberia decir crin?
Desperto y sus rasgos como cuerno, orejas y cola salieron a relucir desde la mañana y se dispuso a cepillar estos con cuidado y vestirse un poco mejor, luego tendria consultas despues de todo...
Escucho el llamado de la puerta gritando al estar cerca de la entrada —Voy!— dijo claro y prontamente sus pasos marcados pero delicados se dirigieron a la entrada para abrir al cartero agachandose ligeramente para no golpear su cuerno con la puerta, si no bastaban sus mas de dos metros naturales el cuerno le agregaba unos centimetros mas.
Observo al contrario sonriendole dulcemente co una ligera reverencia
—Buenos dias....por favor cree pueda dejar la caja en esa mesa cercana...quisiera asegurarme el producto haya llegado intacto por favor....— pidio juntando sus manos como implorando con una sonrisa nerviosa mientras se volvia a adentrar dejando la puerta abierta asi mismo este parecia ponerse a buscar en cajones blanco pulcro asi como la mayoria del sitio parecia predominar el blanco inmaculado por vario rincones, acercandose nuevamente con de su parte n cuchillo especial para abrir correspondencia y un paquete de guantes sin abrir como si de lo mas normal del mundo fuera para el unicornio sentandose frente de la mesa que indico anteriormente al otro
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Post by Lugh O'Floinn on Oct 18, 2021 12:59:45 GMT
Esperar nunca había sido un problema. Después de todo, llevaba muchísimo tiempo esperando unas respuestas de parte del Magisterio sin que estas llegaran. El repiqueteo de los pasos acercándose fueron una señal que captó de inmediato, sin la gran necesidad de aguzar el oído.
Aunque no le sorprendía el aspecto de nadie dentro de la ciudad -puesto que, a su modo, todos eran seres excéntricos- a veces sí podía sentir cierta curiosidad por uno que otro individuo. Al abrirse la puerta y ver a una figura inclinarse un poco, no le quedaron dudas de que aquel era un ser peculiar. No había demasiados selenitas en el distrito dorado que fuesen tan altos y que vivieran en casas relativamente normales.
—Buenos días— contestó al saludo respondiendo también a la suave reverencia de su interlocutor —, no hay problema.
Dio un paso adelante, entrando en la casa lentamente, evidenciando el respeto a su cliente. Sus botas hicieron un suave sonido producto de la fricción la goma de la zuela contra el piso en cada nuevo paso, hasta que llegó junto a la mesa señalada por su anfitrión. Depositó con cuidado el bulto sobre esta y retrocedió un par de pasos. No podía negar que el contenido le causaba curiosidad, aunque no podía mostrarse particularmente interesado en presencia del receptor.
—Espero todo esté en orden— añadió, volviendo a acercarse para poner sobre la mesa unas formas con la información del embarque, recepción y entrega de enseres —, si tal es el caso, por favor, firme en la línea señalada.
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Post by Asher D'Argent on Oct 19, 2021 3:11:14 GMT
Observo de reojo al cartero mientras por su parte y espero no le incomodase ser llamado a poner el paquete dentro del hogar del cliente, cualquiera diria parececia la premisa de algo turbio o indecente, pero mismamente es que no le importaba, la seguridad de la zona era buena no por nada por lo que quizas era mas su confianza en la gente de la zona.
Con ello en mente se aproximo al sujeto para asentir a lo que este indico mientras por su parte comenzo a abrir el paquete tras colocarse guantes esteriles y con cuidado sacar el contenido de este, siendo mayormente equipo medico con vidrio en este asi como objetos algo fragiles de su interior.
Tubos de ensayo, piedras especiales para su tratamiento e incluso un juego de herramientas medicas vario pintas asegurandose un poco en cada cosa con una sonrisa hasta que una pequeña mueca se formaba en el suspirando suavemente
—ugh...me lo temia....— decia esperandolo para bajar lo de sus manos siendo parte de las piedras para su trabajo y en ese caso tomando la forma del otro y firmando por la entrega viendo al otro
—de casualidad no sabe si quien recogio los pedidos en el distrito fauna tuvo inconvenientes?...se que no estoy para contarle mi vida pero...de momento no reportare o reclamare porque la mayor parte del paquete llego intacto, pero no mentire sugerir una mejor manipulacion de este material en especifico....sabe lo que son?....— dijo tomando una piedra blanca tornasol de tacto suave y de forma ovalada semi plana en su palma mas esta se veia con una grietas en los bordes
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Post by Lugh O'Floinn on Oct 23, 2021 18:07:15 GMT
Arqueó las cejas con notoria expresión de sorpresa al ver salir el contenido del envío. Jamás hubiese imaginado que contenido tan delicado hubiera llegado a sus manos. Tenía cierta experiencia trasnportando piezas más resistentes y en rutas mucho más complejas -como en el distrito sombra y el distrito rojo- y había salido airoso, pero esto era quizá un reto que, al ser inesperado, probablemente no pudiera superar.
Ahogó una protesta ante el primer comentario del cliente, conteniendo el impulso para oír la segunda intervención del doctor.
—Todos los pedidos son recibidos por mi persona en el distrito fauna— respondió, eligiendo cuidadosamente sus palabras —, por lo que puedo asegurar que, al menos desde el momento en que llegó el paquete a mi poder, se ha tratado con el máximo cuidado. Lastimosamente no puedo responder por el cuidado logístico que se dio al envío a través del distrito acuático, ni mucho menos puedo dar una respuesta a los resguardos tomados desde el exterior de la ciudad.
Fijó la mirada entonces en la piedra que el otro individuo le exponía. Aquello sin duda debía ser sumamente importante y delicado, pues podía percibir un aura imponente proviniendo del objeto.
—No podría saber qué es— dijo, esbozando una sonrisa, volviendo a alzar la mirada hasta el rostro de su interlocutor —, pero es fácil deducir que es un objeto muy preciado y probablemente muy escaso. Comprendo su molestia.
El desliz podía costarle caro. Pese a no ser un problema ocasionado por la manipulación que él hizo al producto, debía hacerse responsable de todos modos y tomar algunas medidas extra para el futuro. La agencia de correos y encomiendas era relativamente joven en Mistery City, donde los clientes aún no eran demasiados y probablemente la competencia logística podría comenzar a aparecer pronto. No podía darse el lujo de perder usuarios del sistema.
—Por lo pronto, además de mis más sinceras disculpas— añadió, tomando la tabla con el recibo recien firmado —, debo agradecerle por el gesto de no presentar un reclamo formal. Y, por supuesto, me aseguraré de buscar un reemplazo adecuado para el transporte marítimo en futuras entregas provenientes del exterior y del distrito acuático, a fin de asegurar la calidad del servicio.
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