Post by Kenji Kenzo on Feb 5, 2022 1:37:38 GMT
Su corazón latía con tanta fuerza y el tiempo comenzaba a sentirse tan lento, lo cual agradecía, quería quedarse así para siempre, solo ellos dos, los besos que le daba el contrario, tan dulces y profundos, acompañados de las caricias lentas en su torso lograban arrebatarle suspiros, cada uno borrando lentamente de su ser la vergüenza, el odio y el recuerdo que albergaba muy dentro en su corazón, su pecho ahora descubierto dejaba ver las perlas de sudor que comenzaban a formarse en el momento, el frío de fuera no importaba en lo absoluto pues aquellos dos estaban cubiertos por el acalorado momento
Su mirada bajo hasta el Moreno, el cual estaba esperando y el kitsune yacía gritando en su interior que siguiera antes de que se perdiera en la fantasía, su mano acarició los cabellos negros de éste con una sonrisa ladina, dándole así el permiso que necesitaba para seguir, era tan vergonzoso, ni siquiera pudo responder a la pregunta del contrario pues el verle ya sin camisa le había arrebatado el habla de por medio
-Joa...
Fue lo único que pudo articular, dentro de sí luchaba contra la vergüenza y el temor, hasta que comenzó a decidirse y desabrocho el cinturón que traía puesto, su rostro ardía nuevamente como el fuego que comenzaba a encenderse en su corazón, ¿era correcto sentirse así? ¿Sentir algo al menos? No iba a pensar en ello ahora, decidió concentrarse en su compañero toda la noche
Comenzaba a sentir algo que no sabía cómo describir, la curiosidad y el miedo iban de la mano, pero aquellos ojos púrpura destruían por completo aquellos sentimientos, su mano libre cubrió por un momento su rostro avergonzado, bajo hasta su boca pues él mismo quería ver al contrario toda la noche, si bien sh promesa fue que no lo olvidaría, iba a cumplirla grabando en su memoria el encuentro
Su mirada bajo hasta el Moreno, el cual estaba esperando y el kitsune yacía gritando en su interior que siguiera antes de que se perdiera en la fantasía, su mano acarició los cabellos negros de éste con una sonrisa ladina, dándole así el permiso que necesitaba para seguir, era tan vergonzoso, ni siquiera pudo responder a la pregunta del contrario pues el verle ya sin camisa le había arrebatado el habla de por medio
-Joa...
Fue lo único que pudo articular, dentro de sí luchaba contra la vergüenza y el temor, hasta que comenzó a decidirse y desabrocho el cinturón que traía puesto, su rostro ardía nuevamente como el fuego que comenzaba a encenderse en su corazón, ¿era correcto sentirse así? ¿Sentir algo al menos? No iba a pensar en ello ahora, decidió concentrarse en su compañero toda la noche
Comenzaba a sentir algo que no sabía cómo describir, la curiosidad y el miedo iban de la mano, pero aquellos ojos púrpura destruían por completo aquellos sentimientos, su mano libre cubrió por un momento su rostro avergonzado, bajo hasta su boca pues él mismo quería ver al contrario toda la noche, si bien sh promesa fue que no lo olvidaría, iba a cumplirla grabando en su memoria el encuentro
