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Post by Skye Fraser on Feb 11, 2022 21:30:20 GMT
La sangre salpicó sobre su cara y un grito estremeció su ser; tardó varios segundos en darse cuenta que ningún sonido había salido de él... así como tampoco la sangre era suya. Apenas un jadeo de sorpresa escapó de sus labios al presenciar tan mórbida escena dónde todo parecía estar escalando minuto a minuto; el pánico se le quedó atorado en la garganta. "No grites", vino de pronto a su mente y le dejó allí, congelado, viendo como se desarrollaba la escena mientras Dökkur tomaba un extraño papel de protector. Incluso algo curioso por lo peculiarmente llamativa que era su arma.
— ¡Sergio! ¡Noooo! —Exclamó uno mientras se arrodillaba al lado de su compañero herido en el ojo; quiso arrancarle el cuchillo, pero la advertencia de la sombra le hizo parar su acción en seco. Volteó a verle con ojos iracundos y cerró los puños con la clara intención de arremeter contra él... de no ser por aquella arma en su posesión; la cara le cambió a una consternada mientras alzaba las manos.
— Oye, oye, oye... no hay necesidad. —Respondió entonces el jefe, quién ahora esbozaba una sonrisa nerviosa en labios mientras por igual levantaba las manos en señal de paz. No iba a ponerse a pelear con alguien con una pistola; el momento había dejado de ser divertido y la ambición les estaba volteando el escenario. Hizo una mueca entonces, mirando por el rabillo del ojo a su amigo gritar como retorcerse... pero luego también observó hasta el Panquecito Feliz.
Sabía que un alboroto siempre atraía miradas curiosas.
— Mira, mira.... somos jóvenes, no tenemos tanto dinero, peeero te completo esos 25 francos. —Fue metiendo la mano a su bolsillo con mucha lentitud; una que no iba por precaución, sino por ganar tiempo.
Skye mientras tanto, respiraba agitado. Dentro de su pecho empezó a sentir un ardor de incertidumbre insoportable que sólo le venía cuando algo terrible iba a suceder, ¿podía haber algo más terrible que la ocasión? Apretó los labios, mirando un momento el entorno antes de sujetar el brazo con el que Dökkur le estaba agarrando para intentarlo jalar en su dirección.— Señor... —Le llamó en voz sorpresivamente suave pese a todo el miedo que tenía.— Vámonos, vámonos ya, por favor. La policía... seguro el departamento DAC llegará pronto. —Y viendo la escena, el único que acabaría propiamente encarcelado sería la sombra.
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Post by Dökkur on Feb 12, 2022 4:09:11 GMT
—Si no hay dinero entonces me conformaré con la bala. Felicidades por ser el ganador.—
Simple y directo, sin pestañear, disparó.
La reposición de su mano hizo que el tiro dio justo en la mano guardada en el bolsillo de aquel hombre, atravesándola para enterrarse en el muslo. Quizás hasta en el hueso.
El sonido fue ensordecedor, definitivamente atrayendo la vista e iniciando los gritos de transeúntes en la vecindad. Con rapidez apuntó un nuevo objetivo, siendo otro de los bravucones. El olor de la pólvora, el impacto del empuje de la arma, los gritos... en esa fracción de segundo todo se pintó familiar, instintivo... agradable.
No obstante, al sentir el tirón de Skye puso un pie de vuelta a la realidad. La voz suave del ángel lo desconcertó mas fue suficiente para hacerlo ceder y no caer en el abismo del impulso de seguir escalando el momento.
Retrocedió lento al inicio a pesar de que todo estaba pasando en momentos rápidos, luego se volteó y sabiendo exactamente qué hacer tomó al ángel de la cintura y lo cargó, corriendo hacia la moto conforme con la siniestra guardaba y sacaba las llaves para salir lo más rápido posible de ahí.
Colocó a Skye al frente suyo y se sentó detrás de este, metió las llaves y el motor de alto cilindraje se estremeció entre las piernas de ambos. Arrancó. —Agárrate fuerte— le mencionó al otro, saliendo disparado a gran velocidad de ahí.
La sombra parecía uno con la motocicleta a pesar de llevar un pasajero. Tomó vías y caminos alternos para escabullirse y tomar ruta hacia el Distrito de Noche. —Un pequeño detour para perder a cualquier perseguidor— mencionó ronco, metiéndose en calles de lastre y terminando en un barrio abandonado.
Apagó la moto conforme ponía la patilla de esta cerca de la banqueta.
—Whew— resopló con normalidad.
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Post by Skye Fraser on Feb 12, 2022 18:43:53 GMT
El sonido del disparo retumbó en sus oídos, haciéndole saltar y taparse los oídos por la brutalidad del mismo. Contuvo la respiración, escuchando cómo su corazón retumbaba mientras observaba su entorno confundido; era como si todo fuera más lento mientras la gente gritaba... unos por dolor, otros por miedo. Su cuerpo de pronto se sintió ligero e inevitablemente se preguntó si era real; porque todo parecía una pesadilla horrible de la cual estaba desesperado por despertar.
Pero pronto Dökkur le dejó claro que aquello no era más que la pura realidad; una totalmente caótica a la que estaba siendo arrastrado sin posibilidad de escapar. Era como si dos fuerzas estuvieran colapsando y creando un desastre a su paso; las naturalezas de sus razas mostrando sus verdaderos colores. Un "gasp" escapó de sus labios al ser de pronto levantado del suelo con tanta facilidad para luego salir huyendo de la escena; Skye estaba parcialmente consciente de su fragilidad pues en el teatro siempre había sido muy sencillo para sus compañeros cargarlo dependiendo de la escena a practicar y hasta ahora le había parecido algo divertido de ejecutar. Pero en aquél momento no ninguna risa o un ápice de diversión; sólo miedo.
El viaje en moto tampoco fue mejor; Skye nunca se había subido a una moto y las nuevas experiencias siempre le habían fascinado. Pero en aquél momento no podía darse el gusto de disfrutar el momento; se aferraba con fuerza al asiento y en parte se apoyaba en el mismo Dökkur para tener mayor seguridad. Mientras avanzaban y el viento le golpeaba el rostro, Skye no podía dejar de pensar. Repetir en su mente lo que acababa de suceder; los gritos, el dolor... las manos que todavía podía sentir sobre su cuerpo. "Obtuvieron lo que sembraron", trató de luchar contra su propia consciencia. "No es mi culpa", se repetía.
— Lo siento... —Fue lo primero que dijo una vez se detuvieron; cabizbajo y consternado. Torpemente se fue bajando de la moto una vez se estacionaron, pero entonces descubrió que sus piernas estaban demasiado débiles así que acabó cayéndose. Se quejó un momento del golpe en las rodillas, antes de ponerse a observar su entorno... todo estaba demasiado oscuro y la suave luz natural de Skye sobresalía en la zona. El Distrito noche; ese tenía que ser.
De alguna forma se sintió más aliviado; frecuentaba aquél distrito porque Dagmar vivía allí y su carisma natural le ayudó a hacerse de muchos conocidos por el lugar. Pero en dónde estaba en específico se veía.... demasiado solo. Skye se abrazó a sí mismo entonces, frotándose los brazos para obtener algo de calor antes de girar su atención hacia Dökkur.— Yo... —Titubeó; sintió que los ojos nuevamente se le llenaban de lágrimas.— Gracias... por defenderme. —Bajó la cabeza.— Y perdóneme por las molestias...
Suspiró.
— ¿Dónde... dónde estamos, señor?
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